Alertado el sábado 3 de mayo de 2025, el Ministerio de Sanidad e Higiene Pública reaccionó rápidamente ante el descubrimiento de una cantidad anormal de peces muertos en la cuenca de retención de aguas pluviales de Todman. Esta situación provocó la movilización inmediata de los equipos técnicos del Ministerio, en colaboración con varias otras instituciones competentes.
Para proteger a la población, se estableció un cordón de seguridad alrededor de la zona para impedir cualquier intento de recuperar los peces muertos. Los peces muertos fueron retirados e incinerados para evitar cualquier riesgo sanitario. También se tomaron muestras para análisis toxicológicos y químicos con el fin de determinar las causas de esta muerte masiva de peces.
El Gobierno advierte de los peligros potenciales del consumo de estos pescados, que podrían estar contaminados y causar infecciones tóxicas graves como vómitos, intoxicaciones, cólicos y diarreas. Se recomienda encarecidamente a la población que extreme las precauciones y no compre pescado de dudosa calidad, sobre todo si acaba en el mercado.
En un comunicado oficial, el gobierno expresó su determinación de proteger la salud pública e hizo un llamamiento a la vigilancia colectiva para evitar cualquier complicación sanitaria que pudiera perjudicar la vida de los ciudadanos. La investigación en curso debería permitir esclarecer las causas de este incidente.
El Gobierno reitera su llamamiento a la responsabilidad y al civismo de todos, subrayando la importancia de respetar escrupulosamente las medidas adoptadas para garantizar la seguridad alimentaria y sanitaria.
El equipo editorial